7 puntos de tu contabilidad que revisarán a fondo las entidades financieras antes de concederte un préstamo

La obtención de financiación para poder realizar el ciclo de explotación de las empresas, realizar inversiones y financiar determinados proyectos, puede ser una tarea relativamente sencilla o un verdadero quebradero de cabeza para muchos empresarios o responsables financieros de las empresas.

Uno de los factores determinantes para obtener financiación es la calidad de la información contable, ya que de ella emanarán diferentes ratios utilizados en el análisis crediticio y además dicha información debe cuadrar con los modelos tributarios presentados, la CIRBE y el pool bancario.

Si un banco empieza a revisar una solicitud de financiación y comprueba que la cuenta de resultados o el balance de situación tienen errores o incoherencias, se puede dificultar enormemente la tarea de obtener financiación.

Pero además de la capacidad de reembolso, que se estudia con las cuentas de resultados y balances aportados por la empresa, las entidades financieras pueden ver otras cosas, como la existencia de un plan de negocio, el sector al que pertenece la empresa, si la empresa está inscrita en alguna lista de morosos o la existencia de avales.

¿Qué información suelen solicitar las entidades financieras para conceder préstamos o líneas de crédito?

La información que puede solicitar una entidad financiera para conceder un préstamo o un crédito puede ser diferente, dependiendo de los siguientes puntos:

• El solicitante es cliente de la entidad. En este caso la entidad financiera puede que ya disponga de alguna información y pida menos documentación.
• Forma jurídica del solicitante. Si el solicitante es una sociedad se solicitará el impuesto sobre sociedades y en el caso de autónomos la declaración del IRPF.
• Tipo de préstamo. Si se solicita un préstamo para la compra de activos o para un leasing, se puede solicitar una factura proforma de los activos a adquirir.

La documentación más habitual que se suele solicitar es la siguiente:

• Último impuesto sobre sociedades presentado.
• Última declaración del IRPF en el caso de autónomos y avalistas.
• Modelo 347 de la declaración de operaciones con terceras personas.
• Avance del balance de situación y de la cuenta de pérdidas y ganancias, a la fecha más avanzada.
• Liquidaciones de IVA del año en curso (modelos 303).
• Modelo 390.
• Autoliquidaciones del modelo 111 de retenciones e ingresos a cuenta del año en curso.
• Justificantes de estar al corriente con Hacienda y Seguridad Social.
• Pool bancario actualizado con detalle.
• Últimas cuotas de los préstamos de la sociedad.
• Contratos relevantes que tenga firmados la empresa: alquileres de propiedades, contratos de suministro con clientes importantes, etc.
• Solicitud para consultar la CIRBE. Con la CIRBE podrán saber los riesgos directos de la empresa (préstamos, créditos, leasing, etc.) e indirectos (avales a terceros) y comprobar además la fiabilidad del balance de situación.

¿Qué puntos de la contabilidad de una empresa son más analizados por las entidades financieras?

Con la información solicitada, las entidades financieras fijarán su atención en los siguientes puntos de nuestra contabilidad:

• Información fiable y coherente. Es decir, la contabilidad debe estar bien llevada, ya que si se detectan errores en las cuentas presentadas se pondrá en entredicho la información facilitada. Además las liquidaciones tributarias tienen que ser coherentes con los informes contables aportados, puesto que las entidades financieras suelen pedir por lo menos las liquidaciones de IVA y el impuesto sobre sociedades.
• Capacidad de reembolso de la deuda y los intereses. La empresa tiene que tener capacidad para devolver el principal más los intereses. Dentro de la estructura de beneficios de la empresa se fijarán en el margen bruto, el ebitda, el punto muerto, pero también se fijarán en el estado de flujos de efectivo o cash flow. Además, se fijarán en su evolución en los últimos años para ver si la empresa está en crecimiento o recesión.
• Composición del pasivo del balance. De la composición del pasivo del balance se obtiene el ratio de endeudamiento, que mide la proporción que representan las deudas sobre el patrimonio neto de la empresa. Con este ratio, los analistas de riesgos de las entidades financieras pueden ver la estructura patrimonial y los recursos financieros que la empresa ha pedido prestados, en relación con los recursos propios de la empresa. El endeudamiento no debe ser muy elevado según los fondos propios.
• Fondo de maniobra. El fondo de maniobra es una medida de la liquidez de la empresa que indica la capacidad de maniobra que un negocio tiene para poder hacer frente a sus pagos en el corto plazo y, a la vez, poder realizar inversiones o adquisiciones propias de cualquier actividad mercantil. La fórmula que se utiliza para su cálculo es la siguiente:
  FONDO DE MANIOBRA = ACTIVO CORRIENTE – PASIVO CORRIENTE
  Además las entidades financieras pueden poner en relación el fondo de maniobra y los plazos de cobro y pago.
• Fiabilidad de la cartera de clientes y periodo medio de cobro. Para su análisis se tiene en cuenta, además de la información contable, el modelo 347 en el que las entidades financieras pueden ver los principales clientes y proveedores de la empresa. Si alguno de los principales clientes de la empresa se encuentra en una lista de morosos, esto puede dificultar la concesión de crédito. Además si la empresa tiene un periodo medio de cobro corto, generará más liquidez para cumplir con los compromisos de pago de la empresa. Dentro de este apartado, los analistas de riesgo de las entidades financieras también pueden valorar positivamente la existencia de seguros de crédito y caución.
• Valoración adecuada de activos con especial atención a los intangibles. Los activos fijos y las existencias deben estar correctamente valorados. Además, el asiento de variación de existencias que se realiza a final del ejercicio puede modificar sustancialmente el resultado de una empresa en uno u otro sentido, algo en lo que se fijará el analista de riesgos. Además, los inmovilizados tienen que estar correctamente amortizados y los activos intangibles correctamente valorados, ya que en determinadas empresas estos pueden representar una parte muy importante de su activo.
• Peso de los costes fijos en la cuenta de resultados (apalancamiento operativo). Cuanto mayor sea el grado de apalancamiento operativo, mayor es el riesgo de la empresa, pues se requiere de una contribución marginal mayor para cubrir los costos fijos.

La contabilidad de una empresa no es solo el cumplimiento de una obligación mercantil, es la base para la realización de diversas liquidaciones tributarias, una herramienta indispensable para el control de cualquier negocio y la base que utilizan los analistas de riesgos de las entidades financieras para conceder financiación a las empresas. Conviértete en un experto contable con el Curso de Contabilidad Práctica del CEF.-, pero si lo que buscas es convertirte en un experto en finanzas puedes realizar el Máster en Dirección Económico-Financiera.

José Ramón Fernández de la Cigoña Fraga
Colaborador del CEF.-