Así será el nuevo perfil del controller en 2026: un profesional 360º, más analítico, estratégico y digital

El controller es una pieza clave dentro de cualquier organización que cada vez cobra más importancia. Durante años ha sido clave en el control presupuestario y en la elaboración de informes financieros, pero su rol está evolucionando hacia un perfil más estratégico y tecnológico.

La imparable digitalización, la volatilidad de los mercados y la necesidad de agilizar el proceso de toma de decisiones, están transformando el perfil del controller de forma radical. En 2026, el controller dejará de ser solo un experto en contabilidad y finanzas para convertirse en un profesional 360º, que combinará datos, estrategia y tecnología para impulsar la competitividad empresarial.

Este artículo analiza la evolución del rol del controller, las competencias que demandará el mercado en los próximos años y los motivos por los que el controller se está convirtiendo en uno de los perfiles más estratégicos en cualquier organización.

El controller 360º: un socio estratégico para la dirección

El controller tradicional solía centrarse en analizar desviaciones, preparar informes y asegurar que las cifras cuadraran. Hoy en día, las empresas necesitan profesionales más estratégicos, que sean capaces de:

• No solo proporcionar datos, sino interpretarlos en tiempo real.
• Traducir información financiera en decisiones de negocio, proporcionando KPIs claros y accesibles tanto para la dirección general como para las áreas operativas.
• Conectar la estrategia con la ejecución operativa.
• Anticipar riesgos, escenarios y oportunidades.

En 2026, el controller será un socio estratégico de la dirección, un puente entre departamentos y participará activamente en la toma de decisiones críticas. Ya no bastará con aportar datos para que otros los interpreten, el controller debe aportar valor con su visión del negocio.

El poder del dato: el paso del reporting al análisis avanzado

El controller debe dominar el dato, no solo recopilarlo. En su rol 360º tiene que pasar de proporcionar el reporting a realizar análisis avanzados que aporten una visión más profunda del negocio. Para conseguirlo debe hacer lo siguiente:

• Usar herramientas de business intelligence (BI), como Power BI, Qlik, Tableau, etc.
• Crear reportings automatizados con los principales KPI del negocio.
• Integrar fuentes de datos heterogéneas en un ERP (sistema de planificación de recursos empresariales) para facilitar la toma de decisiones de diferentes áreas del negocio en diferentes países.
• Aplicar el análisis predictivo y desarrollar diversos escenarios.

La utilización de herramientas como Power BI permite al controller conectar con diferentes fuentes de datos, analizarlas fácilmente y crear informes y cuadros de mando integrales e interactivos.

La capacidad de construir escenarios futuros utilizando la modelización financiera será crítica. El controller debe saber cómo reaccionar si suben los costes, bajan las ventas o suben los tipos de interés. Un controller 360º con visión analítica profunda será clave para anticipar escenarios y orientar decisiones estratégicas.

Tecnología al servicio del control de gestión: un perfil más tecnológico, menos técnico

La digitalización impulsa la automatización de tareas repetitivas: conciliaciones, cuadros de mando, control presupuestario, etc. El controller 2026 debe ser un profesional tecnológicamente competente en áreas como:

• Uso avanzado de ERPs y herramientas corporativas.
• Automatización mediante RPA (automatización robótica de procesos) o macros.
• Comprensión de flujos de datos e integración de sistemas.
• Evaluación de soluciones financieras y de control de gestión.
• Utilización de herramientas de IA.

Gracias a su competencia tecnológica, podrá liderar proyectos de transformación financiera, optimizar procesos y reducir tiempos. El uso de la automatización y otras herramientas tecnológicas, le permitirá automatizar tareas como el reporting y centrarse en otras con mayor valor añadido.

Comunicación, liderazgo e influencia: un influencer transversal

El controller moderno no trabaja aislado en finanzas. Interactúa con operaciones, marketing, RRHH, logística o dirección general. Por ello necesita:

• Comunicación clara y eficaz.
• Capacidad de traducir datos financieros en lenguaje accesible para diferentes tipos de interlocutores.
• Influencia y liderazgo transversal.
• Empatía y visión integral del negocio.

No basta con “hablar en números”, el controller 2026 debe saber convencer, orientar decisiones y ejercer su influencia para ayudar al equipo.

Inteligencia artificial: una aliada del controller

La IA está transformando la función del controller. Lejos de reemplazarlo, se convierte en su aliada:

• Automatiza tareas rutinarias (conciliaciones, informes, clasificaciones).
• Detecta patrones y anomalías invisibles al análisis tradicional.
• Mejora previsiones mediante machine learning.
• Simula escenarios complejos con múltiples variables.
• Acelera la toma de decisiones con informes listos para dirección.

La IA potencia la capacidad analítica y predictiva del controller, liberando tiempo para interpretar resultados, generar recomendaciones y acompañar la estrategia empresarial.

En 2026 será común trabajar con asistentes IA integrados en ERPs, capaces de generar borradores de informes, detectar desviaciones y sugerir decisiones. La clave estará en quienes sepan usar esas herramientas con criterio, conscientes de sus límites y posibilidades.

El controller también debe saber elegir y utilizar la herramienta de IA más conveniente para cada caso.

Competencias clave de un controller 360º en 2026

En la siguiente tabla se resumen las competencias clave del controller para el 2026.

Este conjunto de competencias convierte al controller en un gestor integral del rendimiento empresarial, no solo un “gestor contable”.

Por qué el perfil del controller será uno de los más demandados

Las empresas se enfrentan cada vez más a entornos de alta incertidumbre, competencia intensa y cambios más rápidos y profundos. Esto exige:

• Tomar decisiones ágiles basadas en datos fiables.
• Procesos eficientes, digitalizados y automatizados.
• Talento capaz de conectar finanzas, operaciones y estrategia.
• Perfiles híbridos: analítico, estratégico, tecnológico y comunicador.

Por ello, el controller 360º del futuro va más allá de un perfil tradicional, es un activo clave para la supervivencia y el crecimiento empresarial.

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José Ramón Fernández de la Cigoña Fraga
Colaborador del CEF.-